Seres humanos en transformación y evolución.

Camino al 8 de Marzo 2023

Tan cerca al el 8 de marzo 2023, conmemoración del día internacional de la mujer y me empieza la incomodidad, ese dolor colectivo que creo que no solo lo sentimos las mujeres (y no a todas nos duele o no nos duele igual). Recordamos de manera muy tangente nuestra herida colectiva de Patriarcado.

Escribo para no olvidar, he aprendido tanto pero tanto este año, miro atrás y ahora comprendo muchas cosas, gracias a mi curiosidad y a que he aprendido a cuestionar casi todo, este año de la mano de maestros y de gente inspiradora me ha llevado a lugares increíbles de descubrimiento.  

Todo por lo que estamos luchando hoy o el 8 de marzo ha cambiado, en México el enfoque ha tomado otro rumbo la equidad quedó en segundo término.

Tristemente y con todo el dolor de mi corazón soy testigo de lo que hoy estamos viviendo, y por lo que hoy estamos luchando, con un nudo en la garganta, un nudo en el estómago y pecho, no solamente las mujeres, también muchos hombres, temiendo por ser víctimas de ataques o de muerte. En México mueren 11 mujeres al día a causa de feminicidios, y que impotencia y tristeza tener que ponerle un número a cada ser humano a cada mujer que fue una hija, una madre, una hermana o amiga, vivimos en un mundo muy hostil y violento, desconfiando de cada hombre que nos mira extraño, en lo más sencillo de ir a hacer compras y tener que prepararnos para no ir muy destapadas o "provocadoras" y cuidarnos de que nadie nos siga. Por un lado en los últimos años estoy consiente de que cada vez está menos normalizado, y lo hablamos más abiertamente entre nosotras y con algunos de los hombres que nos rodean y esto es solamente en algunos grupos sociales, no en todos.

 

¿A quién le echamos la culpa?

Vivimos en una cultura donde es más fácil ver quién tiene la culpa, buscar culpables, y castigarlos.

Vivimos en una cultura donde es más fácil ignorar.

Vivimos en una cultura donde queremos que otras personas solucionen los pedos y los desmadres.

Vivimos en una cultura donde está normalizada la violencia y la destrucción, y me refiero también a la destrucción de la naturaleza.

Vivimos en una cultura de lo desechable, de la rapidez, queremos cambiar resultados, queremos que todo se solucione con una pastilla y no estamos dispuestos a hacer el trabajo que hay que hacer, para que por lo menos si nosotros no lo vivimos, dejar un mundo mejor, a nuestros hijos, a nuestros niños, a la naturaleza.

Entonces, ¿De qué parte nos vamos a responsabilizar cada quien?

La herida que elijo que me siga doliendo.

Hay dolores que yo elijo que todavía me duelan y este es uno que me duele bastante, y gracias a Dios que me duela tanto y que he encontrado el valor de no ignorar a través de tantas mujeres que amo y admiro. Todos los días trabajo desde mi orilla por transformarme primero yo, sanarme primero yo para después poder servir como un puente, no como una pared, para poder proyectar a través de lo que aprendo una forma distinta de vivir, de pensar, de sentir, de actuar, de amar. 

Gracias por este dolor que me motiva a querer ser mejor persona para mí y para los que me rodean.

Todos somos células en este sistema, así como podemos contagiarnos de lo podrido, podemos también repararnos, podemos ser células sanadoras y contagiar amor, equidad, armonía, lo nutritivo, lo que nos expande y nos engrandece.

Un clavado a la historia.

Gracias a los libros que he leído y las historias que he escuchado soy consiente de que las transformaciones toman tiempo, son procesos, esta la contracultura que poco a poco va proponiendo nuevas formas de vivir la vida, y me causa mucha motivación, mirar atrás, honrar y recordar a todas esas mujeres, que aunque muchas de ellas son famosas, la gran mayoría dejaron un legado, y gracias a eso que les dolió, decidieron hacer algo, decidieron dejarnos un mundo mejor GRACIAS porque hoy: 

  • Podemos usar pantalones.
  • Podemos defendernos a través de la re conexión con nuestro cuerpo.
  • Podemos estudiar, recuperamos el derecho al saber.
  • Las mujeres podemos tener cuentas en el banco.
  • Las mujeres podemos votar. 
  • Nos podemos divorciar.
  • Cada vez hay más conciencia y protección para abortar o cuidarnos y usar anticonceptivos. Elegir si queremos ser madres. 
  • Inició el movimiento laboral en la ONU pro de las mujeres. 
  • Múltiples movimientos feministas. 
  • Avances tecnológicos 
  • Cada vez hay más mujeres reconocidas en un mundo que era monopolizado por los hombres, como la política, las ciencias y los deportes.

Por nombrar algunos...

Mis caminos de descubrimiento.

  1. Diplomado Pareja y Sexualidad - Nilda Chiaraviglio. 

Terminar este Diplomado ha sido como quitar una cortina de humo que había frente a mi, aprender de Nilda me deconstruyó completamente, todas las creencias e ideas con las que nací, crecí, creí, viví, las que me dolieron en el alma, las que pensé que no podría cambiar, pues el estudiar, cuestionar, reflexionar, o sea de verdad es un trabajo muy fuerte deconstruir todo lo que pensamos que era la vida, sin embargo es liberador, ha sido como de poco en poco poner plumas en mis alas y  liberarlas y esa libertad es saber que viene con una responsabilidad muy grande, lo cual me empodera aún más. 

        2. UNTAMED de Glennon Doyle.

“Si queremos cambiar lo que derramamos, debemos de trabajar para cambiar lo que llevamos dentro” 

        3. Saskia Niño de Rivera.

¡Wow esta mujer! Gracias a ella aprendí a ver a los no vistos,  a no ignorar en materia de nuestro sistema de justicia, todo el patriarcado que hay detrás de este sistema, he aprendido a ser compasiva, a dejar de tener este impulso de victimizar a las víctimas y castigar a los “malos”. Gracias a sus proyectos y con mucho dolor también (me la paso llorando con sus entrevistas) he aprendido a tener una mirada mucho mas amplia, compasiva y responsabilizarme, y de nuevo, no es esperar a que otras personas resuelvan o hagan justicia, conocer las historias de las personas que cometen crímenes en nuestro país nos da perspectiva, para reconocer que no solamente es culpabilizar a los criminales, los castigos patologizan, la reparación y la reinserción transforman.

      4. La Caída - Karla Suoza.

Una realidad que duele, hablar sobre los silencios que guardamos en lo más profundo de nuestros corazones, tanto las que lo vivimos como cuando somos testigos y de todas maneras no decimos nada y nos hacemos partícipes de abusos de todo tipo, de la culpa, de la vergüenza, de las expectativas y el precio tan caro de no denunciar y el precio a veces aún mas caro de denunciar. 

       5. Masculinidades Tóxicas - Sergio Sinay

¿Qué es ser hombre? ¿Qué significa ser hombre en nuestra cultura? Me costó trabajo terminar este libro pero me pareció muy valioso y nutritivo poder tener una mirada desde el lado de vista de los hombres y este libro es una joya!

Habla de desarrollar lo mejor que traemos como seres humanos para vivir en este mundo, ponerlo desde un lugar especial (de género y de individuos) para tratar de que nuestra vida tenga un sentido. Dejar un mundo mejor de lo que lo encontramos. 

El proceso de lo masculino: "Nuevas Masculinidades" "Movimientos" el que no haya un movimiento de hombres como el que hay con las mujeres,  no quiere decir que no está sucediendo una transformación.

Feminismo: Las mujeres empezaron a salir de lo oscuro a lo luminoso, de lo estrecho hacia lo amplio, nos fuimos encontrando con mas mujeres en el camino y se van formando diferentes movimientos y feminismos.

Para los hombres es un camino distinto de transformación que es ir de lo amplio a lo estrecho, de lo luminoso a lo oscuro, en términos de profundidad, para ellos implica entrar a su mundo emocional, entrar a su mundo afectivo, conocerlo, a descubrir su verdadera identidad, no esa que se construye para competir, ni para ser aprobados, es un camino que baja por un embudo, y cada hombre tendría que hacerlo por si mismo, ese descenso aunque no sea en multitud, no quiere decir que no sea simultáneo, cada hombre hará su proceso, pero no va a ser público, no es un proceso como el de las mujeres, es un proceso en la cotidianidad los hombres no se tienen que hacer feministas, los hombres van a ampliar su masculinidad para incluir los aspectos emocionales, amorosos de la masculinidad.

Habla de que no es necesaria una “nueva masculinidad” es recuperar lo mejor de la masculinidad, no sentir culpa de ser hombres por el hecho de que haya “machos”. Ser macho es desarrollar mal lo que les fue dado, recuperación de una masculinidad que ya existe y que está sepultada bajo mandatos que le impiden manifestarse, en el amor, en la crianza de los hijos, en la forma de construir y mejorar el mundo y no de romperlo a través de la contaminación de una forma de hacer negocios que tiene que ver con el “machismo” y las guerras. 

Transformaciones en la cotidianidad:

  • Padres en sus casas conociendo a sus hijos.
  • Padres cerca de sus hijos. 
  • Hombres que comparten espacios amorosos con las mujeres.
  • Hombres que amen a las mujeres no como “objetos” o como “propiedad” sino como pares (sean o no sean matrimonios).
  • Hombres que se manejen en el mundo de los negocios, pensando en el servicio a la comunidad en la que viven y en la que trabajan, y no en la rentabilidad y en la competencia y como ganarle al rival o destruirlo.
  • Los procesos de los hombres tal vez sean silenciosos, cotidianos y responsabilidad de cada hombre en sus procesos de transformación.

Va a llevar muchísimo tiempo, son muchas generaciones, es un machismo impuesto y no se borra por el entusiasmo y deseo, es mucho tiempo y trabajo para que se transforme. 

         6. Violeta - Isabel Allende

Uno se conecta con lo que ya siente, como una semilla o como un árbol. Un clavado al pasado al reconocimiento de todas esas mujeres que salieron a la calle a buscar un lugar digno, a salir de los paradigmas, a buscar dejarnos un mundo mejor y listo para seguir transformando, desde el amor.

Elijo que este dolor me siga doliendo tanto que sea necesario para no parar, elijo el amor, elijo el trabajo diario, la humildad, la compasión, elijo el compromiso conmigo con las mujeres que ya no están, el compromiso con nuestros niños, con nuestro planeta. 

Agradezco este motor, agradezco mi curiosidad y mi sensibilidad, elijo seguir nutriendo mis raíces y seguir poniendo plumas a mis alas y después derramar mis semillas en tierras fértiles para que mi propósito de vida sea continuo, y crezcan más árboles y flores hermosas para regresar y recuperar el mundo que merece ser nutrido, amado y cuidado.

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